La probabilidad de sufrir algún tipo de problema de salud mental aumenta durante y después de algún evento. Algunas personas desarrollarán trastornos mentales tras una emergencia, mientras otras experimentarán diferentes grados de estrés.
Tiempo para manejo de Primeros Auxilios Psicológicos
Consiste en dar un espacio especializado y de formación en Psicología de 10 a 20 minutos de escucha activa para que la persona angustiada cuente de manera espontánea lo que le está ocurriendo.
Es importante recalcar que todos estos casos deberán ser transferidos a profesionales del tercer nivel en psicología clínica para su debido procesamiento psicoterapéutico como establecen los lineamientos operativos de Salud Mental en Emergencias Sanitaria.
¿Qué es la PAP? (Primera ayuda Psicológica)
Describe una respuesta humana, de apoyo a otro ser humano que está sufriendo y que puede necesitar ayuda tras una situación de crisis. Implica:
- Brindar ayuda y apoyo prácticos, de manera no invasiva;
- Ayudar a las personas a atender sus necesidades
- Escuchar a las personas, pero no presionarlas para que hablen;
- Reconfortar a las personas y ayudarlas a calmarse;
- Ayudar a las personas para acceder a información, servicios y apoyos sociales; y
- Proteger a las personas de ulteriores peligros.
¿Para quién es la PAP (Primera ayuda Psicológica)?
La PAP está dirigida a las personas muy angustiadas, las cuales han estado recientemente expuestas a eventos críticos.
Puede ofrecerse a población infantil y adulta.
No todas las personas que han experimentado un evento crítico necesitarán o querrán PAP
Es importante no forzar el apoyo a las personas que no quieren, pero sí mostrarse disponible y fácilmente accesible para aquellas personas que puedan querer el apoyo.
¿Dónde se ofrece PAP? (Primera ayuda Psicológica)
Dondequiera que sea suficientemente seguro – En condiciones ideales, con cierta privacidad, según corresponda, para mantener la confidencialidad y la dignidad
Grupos Vulnerables ante Situaciones Críticas
Niños/as y adolescentes – Especialmente aquellos/as que estén separados de sus cuidadores Personas con problemas de salud y discapacidad – Enfermos crónicos, ancianos, mujeres embarazadas o lactantes, personas con dificultades de movilidad, personas con deficiencias auditivas o visuales, personas con trastornos mentales graves
Personas en riesgo de discriminación o violencia – Mujeres, ciertos grupos étnicos o religiosos, personas con discapacidad mental.